El presidente de EE.UU., Donald Trump, y el papa Francisco se han reunido por primera vez este miércoles en el Vaticano tras meses de discrepancias en torno a diversos temas como el medioambiente y la inmigración. En esta línea, durante el intercambio de regalos el Sumo Pontífice le entregó a Trump un documento que redactó para la Jornada Mundial de la Paz y una medalla con una rama de olivo.
"Se lo entrego a usted, para que sea instrumento de paz", le dijo Francisco; a lo que Trump contestó: "Necesitamos paz". Antes de abandonar la biblioteca privada del Palacio Apostólico, el mandatario se ha despedido con la siguiente promesa: "No olvidaré lo que me ha dicho". Sin embargo, lo que ha captado la atención de los internautas no fue otra cosa que la cara del papa, quien posaba con un semblante extremadamente serio junto al mandatario estadounidense (quién según algunos tenía una sonrisa algo forzada), su esposa, Melania y su hija, Ivanka.
Muchos usuarios de Twitter han apuntado que esta imagen "resume" el encuentro mantenido entre ambos líderes, mientras que otro ha preguntado de forma irónica: "¿Quién ha sido secuestrado?". También han surgido varios memes en la Red sobre la instantánea.
Asimismo, algunos se han hecho eco del refrán que apunta que las comparaciones son odiosas. "El papa Francisco parece que preferiría estar en cualquier otro lugar a encontrarse con Trump. Así es como se veía con el presidente Obama", reza el mensaje de una internauta, quien adjunta unas fotografías del momento en el que ambos se reunieron en el Vaticano en marzo del 2014. Su encuentro duró 50 minutos frente a los 27 que el papa le ha dedicado a Trump.
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